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5 Cementerios en México para celebrar el Día de Muertos

San Andrés Mixquic, Ciudad de México

Al sur de la ciudad, el cementerio que solía ser un convento es un destino popular para los visitantes de la ciudad que quieren experimentar las fiestas del día de muertos. En las noches del 1 y 2 de noviembre, el lugar se llena de flores y velas, que los visitantes sostienen mientras caminan por todos lados en la famosa Alumbrada. El objetivo de esto es dar señales a los muertos para que sepan a dónde llegar y encuentren lo que sus familiares y amigos prepararos para ellos.

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Pátzcuaro, Michoacán

Esta pequeña ciudad crece en popularidad cada año. El cementerio local se llena de altares y el día de muertos varios músicos lo visitan para llevar serenatas a los difuntos. Además, en el lago que conecta a Pátzcuaro con la isla de Janitzio se hace una procesión en lanchas llenas de velas para llegar a una fiesta con bailes, música y comida tradicional.

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Panteón de Belén, Guadalajara

Este cementerio histórico de Guadalajara hoy en día es un museo, y no tiene tumbas nuevas desde finales de 1800. Aquí hay que ir de día para ver las tumbas más impresionantes del país y de noche para escuchar leyendas de terror acompañadas por un tour hacia los mausoleos más característicos. Aunque estos recorridos pueden hacerse en cualquier momento del año, en el Día de Muertos hay actores disfrazados de los personajes de las leyendas y decoraciones que le dan un aire más místico.

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Aguascalientes, Aguascalientes

Más allá de las decoraciones en el cementerio local, sorprendentes por sí solas, la ciudad se convierte en una ofrenda gigante en honor a José Guadalupe Posada, el creador de la imagen de la Catrina. En el Día de Muertos se hacen procesiones desde el centro de la ciudad hasta los panteones de la Cruz y de la Salud, que suelen recibir hasta 5,000 visitantes.

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Panteón de La Soledad, Toluca

La última semana de octubre y la primera de noviembre hay distintas presentaciones de teatro inspiradas en leyendas populares y otras no tan conocidas sobre los muertos de este cementerio en particular. Para disfrutarlas, hay que caminar por los pasillos que rodean a las tumbas hasta encontrar las pequeñas actuaciones. Además, la noche del 1 de noviembre es dedicada a decorar las tumbas para el concurso del día siguiente, que premia a la mayor creatividad.

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